
La Planta de Manufactura en Cooperación Aguascalientes (COMPAS) operada conjuntamente entre Nissan y Mercedes-Benz, cerrará definitivamente.
En un comunicado conjunto, las empresas adelantaron que el cese de operaciones está programado para el 31 de mayo de 2026. Previo a ello, cumplirán todos sus compromisos previamente adquiridos.
Se trata de una noticia que impacta al sector automotriz del país, pues COMPAS es una de las plantas más importantes del Bajío al emplear a 800 personas y una capacidad anual máxima de 300 mil vehículos.
Tanto Nissan como Mercedes-Benz coincidieron en que la decisión llega debido a “los cambios en la dinámica del mercado automotor y en las preferencias de los consumidores”
Sin mencionarlo en su comunicado, el anuncio también se produce previo a que México inicie las renegociaciones del T-MEC y tras la imposición de aranceles fluctuantes por parte de Estados Unidos.
En ese contexto, el cierre de la planta impactará el sector pues más de 800 empleos directos podrían verse afectados. Además, los proveedores y la toda la cadena de suministro resentirá el cierre.
¿Qué vehículos dejarán de producirse?
Tras el cese de operaciones de COMPAS, en Aguascalientes se dejarán de producir los modelos Nissan, Infiniti QX50 e Infiniti QX555, mientras que Mercedes-Benz, propiedad de Daimler Truck, dejará de manufacturar el modelo GLB, el cual se exportaba hacia Estados Unidos.
Ambas macar adelantaron que la producción de los SUV Infiniti concluirá en noviembre de 2025, mientras que la de GBL se terminará en mayo de 2026.

Aún se desconoce cuál será el destino de los empleados, pero en el caso de Nissan, al anunciar el cierre de su planta en Hidalgo señaló que brindaría acompañamiento para la recolocación o liquidación de sus colaboradores.
En ese sentido, tanto Nissan como Mercedes-Benz adelantaron que el cese de operaciones irá acompañado de comunicación “constante y transparente” para dar certidumbre y atender cualquier situación que se presente.
Nissan y Renault, una alianza fallida
El cierre de COMPAS, también está acompañado de un ambicioso proyecto de reestructura por parte de Nissan, denominado RE:Nissan.
La armadora japonesa pretende cambiar su modelo de producción enfocándolo hacia los vehículos de nuevas energías, por lo que ya desde inicios de año, precisó que prescindiría de algunas de sus plantas.
En el caso de México, el cierre de la fábrica de Aguascalientes se suma al de Hidalgo. Por otra parte, la armadora japonesa también sortea las consecuencias de su fallida alianza con Renault.
Dicha alianza estaba enfocada en el desarrollo de vehículos de lujo, sin embargo el portafolio no terminó de gustar.
En junio de este año, la armadora japonesa comenzó a distanciarse de Renault, anunciando sus planes de reestructura global.
Leer más



